En torno al año 1999 empecé a comprar mis primeros cacharros de grabación medianamente serios y prácticamente estuve una década grabando allí donde se pudiera: casas de cultura, auditorios, salones, sótanos, locales de ensayo, casas de madera o casas rurales.
En 2008 debido a la cantidad de equipo que poseía decidí que había llegado el momento de buscar un lugar estable donde realizar mis grabaciones y producciones.

En 2009 abrió sus puertas “Primavera en el Atlas” Estudio, lugar donde he realizado la mayor y mejor parte de mi trabajo. En su concepción y diseño se concentran muchas horas de estudiar libros de acústica y también la comprensión, fruto de mi experiencia como músico, de las facilidades y comodidades que un estudio debe ofrecer.
“Primavera en el Atlas” en estos once años ha permanecido en constante evolución, refinando cada detalle, alcanzando una acústica controlada y musical, un equipamiento de primer nivel y un entorno cálido y cómodo pensado para el trabajo concentrado y relajado.

Sin embargo, desde mis primeros años nunca he perdido el gusto por la aventura y el desafío que suponen las grabaciones externas y cuando los proyectos lo requieren he continuado grabando fuera del estudio. “Primavera en el Atlas” siempre ha tenido una vocación de apertura, de mirar hacia fuera, de acudir allí donde haya algo interesante que grabar y para ello mi equipamiento está seleccionado y configurado para poder moverse con facilidad manteniendo la máxima calidad de sonido.